jueves, 20 de diciembre de 2007

El mandado



Si amas algo déjalo libre;
si vuelve a ti es tuyo,
si no regresa nunca lo fue.

(Desconozco el nombre del autor)

No quiero retenerte,
sé feliz, vida mía:
no quiero poseerte,
ni aún queriendo podría.



Esta vez una trampa he preparado,

le he encargado el mercado visitar.

La excusa: un mirlo blanco que comprar.

La intención: alejarlo de mi lado.


Que se tome su tiempo y tantee,

que otras geishas le ofrezcan sus encantos,

que lo tiente Filomena con sus cantos;

que le cueste el cariño y regatee.


Marcado está el camino de regreso

con semillas de amor y dulces besos

que a mí lo han de traer si quiere él.


Quieta espero el momento tan temido

en que escoja la senda de otro nido

…o descubra que era yo el mirlo aquel.